Esta semana he ido un par de conciertos. Ha sido una semana completa.
En primer lugar fui a ver a Rammstein, la contundente banda alemana de metal industrial. Ya los había visto con anterioridad, pero es que merece la pena repetir. Es puro espectáculo. Las canciones te pueden gustar más o menos pero el directo se disfruta. Es pirotecnia a lo bestia con grandes estructuras desmontables mientras la música suena. Una pasada.
En segundo lugar fui a ver a los Hardcore Superstar. Una banda de hard rock, glam metal o como lo quieras llamar. Muy directo, gran contacto con el público y en general un buen show. En una sala pequeña con buen sonido.
Pero me encuentro en estos actos sociales que en nuestra sociedad consentimos que reine el absurdo.
En primer lugar pasa que yo encantado pago 50 euros por ver a Rammstein, pues se que gran parte de ese dinero, que podían ser beneficios para ellos, lo usan para crear un espectáculo único. Pero es que donde compro las entradas, en el Fnac acostumbro a mirar que otros grupos tocan y veo cosas como que Green Day u Offspring en su día costaban 90 euros. Sí, 90. Lo repito, 90 pavos de amor. Y de esos 90 no van a emplear tanta pasa en espectáculo. Que sí, que son punk y tal y tienen buenos discos, pero admitámoslo, el hecho de que estén de moda provoca absurdos como este. Que sí, que tienen que cruzar el charco… ¿Entonces por qué puedo ver a Korn Y Flyleaf por 27 euros? ¿Por qué Bad Religión por 22? ¿Y Metallica por 55? ¿Y AC/DC por 75? Señores, que a veces nos timan y nos dejamos. Que Offspring los he visto en directo (Al igual que todos los mencionados menos Green Day) y no valen 90 pavos.
En segundo lugar pasa que al palacio de los deportes no te dejan pasar con la cadena de la cartera. No, no con una cadena de metalero chungo… con una cadenita para que no te roben la cartera. Es que si te vas a zurrar con uno lo normal es decir “Espera que me quito la cadenita de la cartera”. Y claro, tampoco puedes entrar con una botella con tapón. Por si se la tiras al grupo. Siempre me viene a la mente el árbitro que le abrieron la cabeza con una moneda de dos euros o el portero que le pasó lo mismo con un mechero. Eso sí, el cacheo es de coña, ahí si te guardas un revolver en los calzoncillos o en la pierna pasas sin problema.
La siguiente mongolada es que no te dejen entrar con tu bebida a un concierto. ¿Y si yo no consumo alcohol? ¿Y si no quiero pagar 5 pavos por una copa? ¿Y si quiero llevar un puto zumo porque estoy bajo de vitaminas? Pero es que no termina ahí eso, yo antes con 15 años entraba en los conciertos ahora en las salas no te dejan. Coñe, dejadlo en 16 por lo menos. ¿O es que lo chavales de hoy en día de 16 años no beben? ¿Es que no merecen el acceso a espectáculos culturales/musicales? Eso sí, los menores pueden pasar a ver a Mago de Oz en recintos grandes donde en su día sacaban a strypers… Lógico y normal. Un niño de 12 viendo tías en pelotas bailando pero uno de 16 no puede estar en un local viendo simplemente a un grupo tocar. No se quien vela por nuestra educación y el progreso mental de nuestros chavales pero debe ser una contradicción ambulante.
2 comentarios:
Totalmente de acuerdo contigo.
Oye, por que si son hardcore superstar... hacen hard rock!!¿¿ algo no va bien XD
En el de rammstein un mini de cerveza valía... 10 PAVOS!!!! increible :)
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